El tramadol es un analgésico opioide sintético que se utiliza para aliviar el dolor moderado a intenso, tanto agudo como crónico. Funciona actuando sobre los receptores opioides en el cerebro y también inhibiendo la recaptación de neurotransmisores como la serotonina y la norepinefrina, lo que ayuda a modular la sensación de dolor en el sistema nervioso central. Se prescribe comúnmente para el control del dolor postoperatorio, dolor por lesiones agudas, dolor crónico como el asociado a la artritis o neuropatía diabética, y también para dolor de espalda crónico. El tramadol permite mejorar la calidad de vida del paciente al reducir el dolor y facilitar la movilidad y las actividades diarias. Debe usarse con precaución y bajo supervisión médica para evitar riesgos, especialmente en tratamientos prolongados, debido a su potencial adictivo.
