La coqueluche, también llamada tos convulsa, tos ferina o pertussis, es una infección respiratoria aguda muy contagiosa causada por la bacteria Bordetella pertussis y afecta principalmente las vías respiratorias.
Qué es y cómo se contagia
La coqueluche es una enfermedad infectocontagiosa que se transmite por el aire a través de gotitas respiratorias al toser, estornudar o hablar cerca de otras personas. Suele circular en brotes y puede presentarse en cualquier edad, aunque los casos más graves ocurren en lactantes pequeños.
Síntomas principales
Al inicio se parece a un resfrío, con mucosidad nasal leve, tos suave y a veces febrícula. Luego aparecen ataques de tos intensos y repetidos (tos paroxística), a menudo seguidos de dificultad para respirar, ruido al inspirar y, en muchos casos, vómitos después de toser.
Riesgos y complicaciones
En bebés, la coqueluche puede causar neumonía, pausas respiratorias (apneas), convulsiones y, en casos graves, la muerte por insuficiencia respiratoria. El grupo de mayor riesgo son los lactantes menores de 6 meses, sobre todo si aún no completaron el esquema de vacunación.
Prevención y tratamiento
La principal medida de prevención es la vacuna contra la pertussis (incluida en las vacunas combinadas infantiles y en refuerzos en adolescentes, adultos y embarazadas). El tratamiento incluye antibióticos y medidas de soporte respiratorio; los lactantes pequeños suelen requerir hospitalización para vigilancia cercana.
