Javier Aguirre tuvo tres etapas como director técnico de la Selección Nacional de México. En el Mundial de 1986, Aguirre fue jugador de la selección mexicana y formó parte del equipo que disputó México 1986 bajo la dirección de Bora Milutinović. En esa Copa del Mundo, Aguirre jugó como futbolista, no como entrenador, y su participación es recordada como parte de la generación que disputó el torneo anfitrión de México. Posteriormente, ya como técnico, dirigió a la selección en otros Mundiales: Corea–Japón 2002 y Sudáfrica 2010, quedando en octavos de final en 2002 y llegando a octavos en 2010 también (con actuaciones destacadas en fases de grupo y torneos de la CONCACAF).
