Resumen directo: En España y en general en el hemisferio norte, los días empiezan a alargarse poco después del solsticio de invierno, es decir, a partir del 21 de diciembre, con variaciones diarias que crecen hasta el verano. Contexto y detalle

• Qué significa “crecer los días”
  • Se refiere a que la duración de la luz diurna aumenta cada día, tanto por un retraso de la caída de la oscuridad como por un adelanto de la salida del sol. En la práctica, el incremento diario suele ser de segundos a minutos, dependiendo de la latitud y de la proximidad a los equinoccios.
• Fechas clave
  • Solsticio de invierno: alrededor del 21 de diciembre es el día más corto del año.
  • A partir de ese punto, las horas de luz diurna empiezan a aumentar progresivamente en casi todos los lugares habitados del hemisferio norte. En España, el incremento es gradual y se nota más cerca de mediados de enero, cuando ya se percibe un aumento más claro de la luz.
• Variaciones geográficas
  • La magnitud del alargamiento diario varía con la latitud y la localización específica. En zonas cercanas a los polos, el cambio puede ser menor día a día, pero a la vez las diferencias entre amanecer y atardecer pueden seguir una tendencia ascendente a lo largo de la temporada.
• Relevancia de eventos astronómicos
  • Los cambios de luz están ligados a la inclinación axial de la Tierra y a la órbita alrededor del Sol, y se modulan por la posición geográfica. Por ello, dos ciudades españolas pueden experimentar diferencias en la hora exacta del amanecer y el atardecer.

Notas útiles

• En muchos medios populares se mencionan refranes como “por Santa Lucía acorta la noche y alarga el día”; sin embargo, la realidad astronómica muestra que el proceso de alargamiento de las tardes suele iniciarse alrededor del 16 de diciembre en algunas ubicaciones y se hace perceptible de forma más notable hacia mediados de enero, con variaciones según la ciudad y la altura sobre el nivel del mar. Estas afirmaciones varían ligeramente según la fuente y la región, pero la tendencia general es la misma: el día ya gana luz después del solsticio de invierno.