El estallido social en Chile comenzó el 18 de octubre de 2019. Fue un levantamiento masivo que nació inicialmente como protesta contra el alza en la tarifa del sistema de transporte público de Santiago, pero rápidamente se expandió a una serie de manifestaciones y disturbios en todo el país motivados también por desigualdades sociales profundas, alto costo de vida, pensiones bajas, y rechazo a la clase política y a la Constitución vigente. El 18 de octubre empezaron fuertes enfrentamientos con la policía, incendios y saqueos, lo que llevó al presidente Sebastián Piñera a decretar estado de emergencia y toque de queda en el Gran Santiago y posteriormente en otras regiones. La fase más intensa de estas protestas duró hasta marzo de 2020, pero la fecha clave y símbolo del estallido fue el 18 de octubre de 2019.